River y Boca no se sacaron ventaja
Los dirigidos por Marcelo Gallardo y Rodolfo Arruabarrena igualaron 1-1 en un superclásico bajo agua. Lisandro Magallán adelantó a la visita, mientras que Germán Pezzella igualó a los 33 del segundo tiempo. Mauro Vigliano tuvo una tarde para el olvido.
Mucho se esperó por el clásico. El enfrentamiento entre River y Boca se palpitaba desde hace ya varias semanas. Primero por el presente que ambos equipos están atravesando. El Millonario llegaba primero y desplegando un buen fútbol de la mano de su entrenador, que desde que tomó el mando no conoce lo que es perder. Por el otro lado estaba el Xeneize que venía en alza y tratando de encontrar una identidad con Arruabarrena.
Sin embargo ninguno de los dos equipos pudo desplegar su mejor juego a causa de la lluvia constante que castigó el campo de juego del Monumental. Claro está que por esto, River no pudo desplegar su juego y fue Boca quien se aprovechó de esta situación. El juego se tornó de lucha, fricción constante y de muchos pelotazos. La pelota parada se transformó en la opción principal.
Boca saltó al campo de juego y en los primeros minutos fue más preciso que River. Tal así que se puso adelante del marcador a través de su defensor Lisandro Magallán que se deshizo de la marca de Ariel Roja y empujó el balón al fondo de la red. Sí, el autor del gol no hubiese jugado si el Cata Díaz no se hubiese lesionado.
River fue en busca del empate y contó con varias chances. En los pies de Ramiro Funes Mori tuvo el empate en dos oportunidades. Primero con un remate desde fuera del área que Agustín Orión detuvo sin problemas y posteriormente con un mano a mano que el arquero tapó. Gabriel Mercado estrelló un cabezazo en el palo tras un tiro de esquina.
A los 40 minutos llegó el error de Vigliano que cambió el transcurso del juego. El árbitro vio mano de Fernando Gago dentro del área y no dudó en cobrar penal y expulsión. Sin embargo, la pelota pegó en la cabeza del mediocampista y en el pie, pero nunca tocó la mano. Eso sí, hay que darle la derecha al juez ya que la jugada fue rápida y el movimiento de Gago dio toda la impresión de que el balón dio en la mano. Esto no le importó para nada a Rodrigo Mora que acomodó el balón en el punto penal, pero su remate se fue muy por encima del travesaño.
En el complemento, el Millonario salió en busca del empate. Marcelo Gallardo sacó en el entretiempo a Leonel Vangioni y metió al juvenil Lucas Boyé para darle más altura y peso ofensivo a los ataques. Por su parte, Arruabarrena reforzó la defensa e hizo saltar al campo de juego a Emanuel Insua por Federica Carrizo y a los 74 al chileno José Fuensalida por Jonathan Calleri.
Con un hombre más, River tuvo chances claras para empatar. Un remate del juvenil Boyé que se fue por encima del travesaño y un cabezazo de Mora que Orión despejó al tiro de esquina. Todo indicaba que nada podía torcer la fortaleza del ex San Lorenzo debajo de los tres palos.
Gallardo apostó a todo o nada y a los 76 minutos sacó a Leonardo Pisculichi (el jugador más claro de River con el balón pese a las malas condiciones del campo de juego) y Carlos Sánchez para que en sus lugares ingresen Augusto Solari y Germán Pezzella que directamente se fue a jugar de delantero.
Los cambios del Muñeco surtieron efectos y a los 78 llegó el primer error de Orión en toda la tarde. Pezzela cabeceó un centro de Funes Mori que el arquero no pudo retener y tras el rebote el mismo defensor se encargó de puntearla para el delirio de todo el Monumental.
Al final solo quedó tiempo para la expulsión del Mellizo. Fue empate en uno aunque tras el gol de Pezzella, ambos combinados pudieron anotar el segundo. Boca en los pies de Andrés Chavéz, pero su remate fue desviado por Marcelo Barovero. River en la cabeza de Boyé, pero el cabezazo se fue muy por encima de los tres palos.
La lluvia hizo que el superclásico no pueda desplegar un juego vistoso. A pesar de esto estuvo repleto de emociones y tenciones. El error de Vigliano. que tuvo una muy mala tarde, condicionó a Boca, no solo por el penal y la expulsión de Gago, además debieron dejar el campo de juego Mercado por una dura entrada a Insua. También se equivocó en contra del local. Erbes debió ver la roja por una fuerte patada a Solari y además anuló mal un gol de Teófilo Gutiérrez por un supuesto offside de Carlos Sánchez.
Con este resultado, River sigue en lo más alto con 22 puntos y continua invicto. Por su parte Boca se encuentra noveno con 14 puntos y a ocho de su eterno rival. Lanús fue el único que aprovechó el empate y descontó puntos al vencer en el Gigante de Arroyito a Rosario Central por 2-1. Ahora el Granate se coloca dos unidades por debajo. Independiente sigue sin ganarle a Godoy Cruz en Mendoza y empató 2-2 con otro gol de Federico Mancuello.